miércoles, 4 de noviembre de 2009

Vídeos de mis trabajos en la huerta

El año pasado los reyes me trajeron una cámara de fotos digital bastante maja con la que descubrí lo fácil que resultaba grabar vídeos y, enredando, enredando, fui grabando cosas que hacía en la huerta.


Luego descubrí el programa de Windows, Movie Maker y, aunque ya había hecho cosas con otros más complejos me sorprendió muy gratamente lo sencillo que resultaba su manejo y los buenos resultados obtenidos.


Por entonces empecé la construcción de mis bancales cerámicos y decidí probar suerte. Grabé cuatro cosillas, lo monté y lo puse en Infojardín.


El éxito fue notable a juzgar por los comentarios que hicieron al trabajo, aunque siempre tuve la duda de qué había provocado el éxito, si el trabajo o la indumentaria.



En poco más de dos minutos valoraba principalmente la comodidad del trabajo en estos bancales y mostraba cómo los había hecho.













He podido ver que la calidad de la reproducción de los vídeos en YouTube, tanto en imagen como en sonido, deja bastante que desear por lo que los he colgado en Megaupload para poder descargarlos y verlos a mayor tamaño de pantalla y con una calidad mayor.

Después de cada vídeo pondré en un enlace a la descarga de Megaupload




Mi interés por la producción de vídeo me llevó a descubrir el programa Camtasia con el que, además de hacer los montajes, podía capturar no sólo la pantalla actual del ordenador, como hacen muchos programas, sino la secuencia de imágenes o sea un vídeo de lo que pasaba por la pantalla. Incluso podía grabar mi voz al mismo tiempo. 



De eso a pensar en la manera de hacer tutoriales con el programa no había más que un paso.
Y así fue como, imitando a las grandes productoras americanas, lancé otro vídeo: Mis bancales que explicaba de forma sencilla cómo había utilizado el Movie Maker para montar el vídeo anterior Bancales cerámicos.








Ya iba mediado mayo y tenía sembradas bastantes cosas en mis bancales cuando decidí hacer una siembra de rabanitos, zanahorias y espinacas.





Estas plantas no se siembran en semilleros porque no toleran, o lo toleran mal, el trasplante así que se hace una siembra de asiento que consiste en sembrar las semillas directamente en el suelo.



Este sistema se utiliza también para hacer semilleros al aire libre.


Como había poco escrito sobre el sistema, me decidí a explicar cómo lo hacía yo en un nuevo vídeo: Semilleros y siembra de asiento.





Muchos de los que habían comentado mi primer vídeo habían insistido en que les gustaría ver los bancales más adelante, cuando ya estuvieran en plena producción; así que a primeros de julio hice una nueva grabación sobre el estado de mi huerta con lo que tenía plantado por entonces.
Contaba los problemas de los tomates, la siembra escalonada de judías, la diferenciación de flores macho y hembra en los calabacines y añadía un pequeño complemento sobre la polinización en flores.
A este vídeo lo titulé: Mis bancales progresan.



La producción de los bancales durante todo el verano fue muy buena.
Tuvimos problemas con los tomates porque hubo muchísima humedad y nieblas desde la primavera. Luego el verano no fue nada caluroso, así que sufrieron mucho.
Pero las que se llevaron la palma fueron las berenjenas que no se libraron del ataque del pulgón en todo el verano.
En este vídeo utilicé el microscopio para grabar la actividad de los pulgones y el resultado fue, cuando menos, curioso.
En la última parte explico cómo preparo los bancales antes de dejarlos descansar el invierno. En dos de ellos pongo abono verde para suministrar nitrógeno para la próxima temporada.
Titulé a este vídeo Trabajos de otoño.



Diciembre es un mes que no se presta a muchos trabajos en la huerta por lo que me gusta dedicarlo a preparar el terreno, arreglar algún estropicio, revisar la maquinaria etc.
Es buen momento para pensar en los semilleros que ya pueden iniciarse en enero si se pueden tener a resguardo en invernadero.
Hacía tiempo que venía dándole vueltas a la idea del germinador. Ya había tenido incubadora hacía años y un germinador no es otra cosa que un calentador no de huevos (con perdón) sino de semillas y ya puesto a hacerlo decidí mostrar cómo.
Llevo un mes con él y estoy teniendo unos resultados extraordinarios y, además, ha servido de base para construir otros modelos con frigoríficos, por ejemplo.
El título de este vídeo es: Construcción de un germinador.


Una vez construído el germinador había que rentabilizarlo y la mejor manera era llenándolo de semillas, así que me puse manos a la obra.
Se me ocurrió, como novedad, tratar de eliminar el repicado de las plantas y, aprovechando que me pude hacer con un montón de vasitos de helado, preparé una primera carga con semillas de flores y aromáticas.
Por lo general, las flores tienen unas semillas minúsculas y es impensable poner dos o tres semillas por vaso, así las distribuí lo más espaciadas posible.
A medida que germinaban las iba sacando del germinador y las llevaba al invernadero que construí el año pasado que, junto a uno del Lidl, se me llenaron en un plis-plás, así que tuve que montarme unas estanterías en la cabaña para poner los siguientes lotes de plantas.
Las semillas de tomates, pimientos y demás hortalizas las he puesto en la creciente de enero y están brotando ahora.
Para explicar este proceso hice otro vídeo Semilleros para el germinador.


Las plantitas brotadas en el germinador han ido creciendo y, aunque puse dos o tres semillas en cada vaso pensando en dejar sólo una, ahora me da pena y quiero utilizarlas todas. Así que a pesar de tratar de evitar el repicado, ahora me he propuesto hacerlo.
El repicado es una operación sencilla pero delicada. Como en casi todo, he encontrado opiniones que dicen que hay que hacer el repicado cuando las plantitas tienen ya sus hojas verdaderas desarrolladas; pero no falta quien dice que el repicado cuanto antes mejor.
A mí me han funcionado los dos. Recuerdo unas semillas de menta que no brotaban en tierra: las puse sobre papel húmedo en el germinador y a los pocos días se convirtieron en unas plantas diminutas que había que sacar a la luz para que no se ahilaran. Poniendo unas almohadillas de esponja en las puntas de las pinzas para no aplastarlas, las repiqué a unos vasos de papel y brotaron todas. El único problema lo tengo a la hora de regarlas porque eran tan pequeñas que desaparecían entre el sustrato en cuanto le llegaba un poco de agua.
Para explicar como hago el repicado he grabado un nuevo vídeo en el que he aprovechado para mejorar la técnica de elaboración de vasos de papel de periódico y para hacer unos cartelitos con los que clasificar perfectamente las plantas que repicamos.
Lógicamente, he titulado al vídeo: El repicado



Desde que conozco los bancales profundos con el amigo John Seymour y la posibilidad de acoplarle un invernadero portátil, sabía que el gallinero sería cuestión de tiempo y en esta temporada más o menos floja de trabajo, antes de empezar las plantaciones, me decidí por su construcción.

Creo que he dado con un buen sistema de engarzado de las piezas a base de alcayatas que facilitan enormemente las labores de montado y desmontado, además de proporcionar una unión bastante sólida entre las piezas.

Una vez que el bancal quede limpio trasladaré todo a otro para empezar de nuevo.

Lógicamente esta actividad no se puede hacer a partir de mayo porque en esas fechas todos los bancales estarán ocupados. Para entonces tengo que decidir una de dos soluciones:
- Instalar el gallinero en una zona libre de EL PRAO
 manteniéndolo allí todo el verano.
- Cercar la zona de los bancales y dejar que correteen libres por todo EL PRAO.

Para mostrar las características del gallinero hice un vídeo que he titulado: Gallinero portátil





Siempre he tenido problemas a la hora de sembrar judías verdes o cualquier tipo de alubia porque pierdo muchas que no brotan por el ataque de lombrices, gusano gris o babosas que se comen los brotes o simplemente por falta o exceso de riego, así que, utilizando un sistema para ver y estudiar la germinación de las semillas, pensé que eliminaba unos cuantos problemas de una vez.
El sistema está explicado en un vídeo que titulé Judías verdes.





Descargar el vídeo

A lo largo del verano tenemos que recoger las semillas que nos servirán para conseguir las plantas de la próxima temporada. Es una tarea generalmente sencilla pero, en ocasiones, requieren algunas precauciones para no dañarlas. Conviene también preservarlas de su peor enemigo: la humedad que las pudriría o las haría germinar antes de tiempo. De todo ello trato en el vídeo que he titulado Recogida y conservación de semillas.



Descargar el vídeo

El invierno ha sido especialmente duro y largo.Desde el mes de setiembre hasta marzo no ha parado de llover y hacer frío. Un temporal a principios de febrero con vientos de más de 130 km/h hizo destrozos importantes en El Prao. Cuando nos estábamos reponiendo de sus efectos, otro, aún más temible nos tuvo encojidos durante dos días a la espera de que nuestras cosas resistieran.
El invernadero y algún árbol fueron víctimas de los temporales; pero, afortunadamente no tuvimos que lamentar más daños importantes.
En estos días de temporal y de mediados de febrero se cumplían las primeras 100.000 visitas a mis vídeos en YouTube y quise celebrarlo presentando los pocos trabajos que este invierno nos permitió y, para ello, grabé un vídeo que titulé 
Duro invierno.



Ver el vídeo con Megaupload

Descargar el vídeo

Después de un invierno malo... una buena primavera.
Cuando las plantas vuelven a la vida llenándolo todo con sus colores y los campos se llenan de flores entre las que pululan una infinidad de insectos atraídos por sus vistosos colores, sugerentes olores, el dulce y nutritivo néctar o el polen, transmisor de vida y energía, he creído conveniente rendir un homenaje a la primavera con este vídeo dedicado a La polinización.







lunes, 2 de noviembre de 2009

Suances














No sería sincero en absoluto si dijera que no me siento afortunado por vivir en Suances, una de las villas marineras cántabras que compiten en belleza con este paisaje agreste y el bravo mar que conforman nuestro sobrio y templado carácter.
Tampoco sería justo si no me sintiera afortunado de tener la posibilidad de descansar mi vista en la lejanía de este horizonte marino a sólo cinco minutos de El Prao, cuando el trabajo y el cansancio me lo aconsejan.
Los suancinos, muy marineros ellos, siempre han sido conscientes de los peligros de este mar que les impide, con frecuencia, salir a faenar viéndose obligados a volver los ojos a tierra durante largas jornadas invernales.
Así es muy normal que cada familia haya intentado reforzar su economía con la huertuca o las vacas por lo que las tierras de labor y los praos han sido siempre muy abundantes y la práctica agrícola y ganadera, una actividad habitual y complementaria de la pesca.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Descripción de El Prao


Se sitúa El Prao en una hondonada conocida como Redondo, muy bien resguardado de los fríos vientos del mar que vienen del norte.
Para mitigar un poco los efectos del gallego y del noroeste he plantado un seto de Leilandii que protege muy bien los frutales y la huerta.
En la parte baja, el estanque y los kiwis forman un fresco rincón durante el verano que atrae a gran cantidad de pájaros, sobre todo miruellos (mirlos), gorriones y jilgueros.
La higuera que, con sus raíces, amenazaba al estanque y a un depósito ha quedado convertida en escultura: Hacia el cielo


Otro rincón muy agradable es esta rocalla de la entrada que, poco a poco, se ha ido llenando de coníferas y arbustos ornamentales.
En verano relleno los huecos con flores que añaden un tono de colores al verde de siempre.
En ella estoy colocando también una colección de acebos de distintas clases para hacer un poco de honor a mi apellido.
Un enorme sauce llorón, cuyas ramas apenas se entreven en la parte superior cubre gran parte del espacio y nos proporciona sombra y frescor.


Junto a la barbacoa, en un bonito rincón dominado por la piedra, una palmera nos proporciona también la sombra que hace más frescas las merendolas del verano.
En las grietas de la piedra grande tengo plantados cactus que, con la palmera, dan un toque tropical.
Es un lugar muy agradable también para sentarse en el banco a leer, escuchar música o disfrutar de la tranquilidad de un lugar a sólo cinco minutos del bullicio de las playas escuchando sólo el canto de los pájaros, los ladridos de los perros o el tintineo de los campanos de las vacas.




En la zona de frutales he tratado de poner la mayor variedad posible dentro de lo que a mí me gusta, así tengo: naranjo y limonero, kiwis, ciruelo, nísperos, caqui, membrillo, nectarina, cerezo, guindo, higuera, melocotonero y multivariedad de perales y manzanos.
Utilizo algunos para mermeladas, dulces y gran cantidad de zumos.
La mayor producción es la de los limones y, sobre todo, peras y manzanas.
Me encantan los nísperos pero una enfermedad, la mancha gris, me estropea cada año la variedad más deliciosa


El agua de riego procede de la lluvia en su totalidad.
El pozo es sólo un gran depósito que recoge un hilillo de agua que sólo corre cuando llueve pero con él lleno éste y otros depósitos con los que no suelo tener necesidad de más.
Teniendo en cuenta que los periodos de sequía en esta tierra no suelen ser muy prolongados, hasta ahora no he tenido necesidad de aportaciones extras.
Como no soy muy partidario de la comodidad del riego por goteo, tengo ya gran habilidad en el uso de la cuerda, la polea y la regadera.







En la huerta me inicié hace años en el sistema de los bancales cerámicos. La superficie de cultivo está casi treinta centímetros más alta que el pasillo con lo que la comodidad es extraordinaria.
Por otro lado, con la técnica del bancal profundo que permite una mayor concentración de plantas, el rendimiento ha sido espectacular.
Todo ello unido a la facilidad para tener el terreno de plantación limpio de malas hierbas ha contribuído a que considere este sistema como ideal para la huerta.



...y la cabaña entre el sauce y el nogal.
A la derecha el hotelito donde hibernan las plantas más delicadas y donde brotan las primeras semillas en los albores de la primavera.
El ojo de buey recuerda la vocación marinera de Suances y el porche sabe de muchas ideas y proyectos que han nacido a su sombra: es allí donde descansamos y disfrutamos del panorama mientras surgen los planes y se fraguan los trabajos por realizar.